La visibilidad (eso de lo que todos hablan en internet) es la clave.
De nada te sirve una web bonita si no la visita nadie.
Tampoco sirve que emplees horas en tus redes sociales, si no obtienes nuevos potenciales clientes cada día.
El márketing digital es la única herramienta que te permite llegar a desconocidos y convertirlos en nuevos clientes a corto plazo.